Es una fusión de cepas seleccionadas de Chardonnay, Sauvignon Blanc y Moscatel; cada variedad es fermentada de manera separada para que, luego de obtener los vinos base, se mezclen para pasar a una segunda fermentación de manera natural y obtener un burbujeante vino espumoso seco de gran calidad. Éste, posteriormente se mezcla con aromáticas y deliciosas fresas chilenas, originarias de la Patagonia chilena. El resultado es una bebida única y natural con una graduación alcohólica de sólo un 8%.